Algunas observaciones de salidas al campo.
Con motivo de un seminario-taller sobre Liderazgo y
trabajo de equipo, quise aprovechar unos días para conocer algunas de las
actividades de los técnicos de campo. No quise interferir sus labores.
Simplemente –y así lo advertí- mi interés era conocer cómo hacían sus labores,
previamente programadas. Resultaron dos al azar. Asistí a unas visitas a fincas
y en una de ellas tuve la oportunidad de conocer la labor de un líder dentro de
un programa muy particular y muy específico.
Durante el desplazamiento íbamos conversando sobre
la situación de los productores, las distintas entidades que tienen influencia
en la zona, las desavenencias que se presentan entre algunos de ellos, en fin,
me dieron un bosquejo de la zona en la que nos encontrábamos.
El énfasis en la seguridad.
Me llamó mucho la atención la
orientación del trabajo que el técnico daba en sus recorridos por las fincas: la seguridad, el riesgo. (No era en
vano. De regreso al pueblo recogimos a un productor de unos sesenta años de
edad, que estaba esperando transporte para ir al hospital. Se había rodado de
manera grave lo cual le ocasionó una hernia inguinal bastante notoria)
En las fincas, nuestro extensionista, junto con el propietario y
el encargado-administrador, revisaba con especial cuidado la ubicación de las
herramientas, los insumos, fertilizantes, pesticidas; es decir, los puntos de
posibles mayores riesgos para la salud y seguridad de los operarios. Preguntaba
por las labores y las acciones que el productor había hecho en los últimos
días, el registro de las mismas con sus respectivos costos; hizo una revisión del plan de trabajo de la finca y discutió
con el productor otros temas relacionados con la asociatividad, y el avance de los
proyectos para los siguientes meses.
Tuve la oportunidad de hablar con unos líderes de un programa que
busca el apoyo a las labores de extensión, y de animación y compromiso de los
jóvenes por el campo. La mayoría de estos líderes –según me comentaron- son
jóvenes, hijos de productores rurales, estudiantes universitarios o de cursos
técnicos. Es un gran beneficio para la comunidad, para el joven-líder y para la
institución.
Por qué
logra sus metas?
Mis observaciones y mis preguntas iban dirigidas a identificar su
“estrategia” para lograr las metas. Se puede concluir que su éxito se basaba en
los siguientes puntos básicos:
- Tiene muy clara la diferencia entre metas y
actividades. Me comentaba que si una actividad no lograba los resultados
esperados (metas), intentaba otras diferentes hasta lograr el cometido. Me
insistía en que todo lo desarrollaba de común acuerdo con el productor.
- Sin que me lo hubiera expresado claramente,
observé que aplicaba el concepto de la ley de Pareto. Buscaba actuar sobre
aquellas tareas que le daban mayor eficiencia.
- Atendía a los productores con gran interés,
respeto y dedicación. Se le veía la pasión por su profesión. Dejaba a un
lado alguna actividad aparentemente urgente, para prestar atención al
agricultor.
- Su método de persuasión se fundamentaba en dar
explicaciones del por qué, de las razones, antes
que del cómo hacer y el para
qué hacerlo.
Esta última es una de las razones que
Simon Sinek expresa en sus conferencias
y en su libro[1] para explicar el éxito de
los líderes en las organizaciones.
Mis
reflexiones.
Después de este acompañamiento a unos extensionistas pude
constatar que cuando el trabajo se convierte pasión, ya no es más un trabajo sino un disfrute de lo que
se hace; surge un entusiasmo contagiante, y en las personas que nos rodean se
va despertando el interés y el potencial para solucionar problemas; y se incentiva la consolidación de los
grupos y las comunidades.
Surge así el liderazgo comunitario.
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